Emprendedora de alma y corazón, con más de veinticinco años de experiencia, Delphine conoce el mundo de los negocios. Siempre exploradora y ávida de vida, pasó de ser una empresa unipersonal como diseñadora de moda a medida con su propia marca, a gestora de calidad y a ampliar una próspera fábrica como la reina de las hamburguesas vegetarianas que es.
Su voluntad apasionada y su perseverancia para mejorar siempre en todo lo que hace la llevaron a construir una nueva vida en la hermosa isla de Gran Canaria. Con el apoyo siempre presente de su tribu (su marido -el amor de su vida y su alma gemela- y sus cuatro hijos -cuatro almas gemelas adicionales para toda la vida-), decidió dar una nueva oportunidad en el día a día.
Delphine lleva la honestidad y la autenticidad en lo más profundo de su corazón. La creatividad, en todos los niveles posibles, es lo que impulsa su organizado cerebro a diario.
Cuando Delphine no está trabajando en nuevos proyectos, disfruta del pelo salado después de coger las más bonitas olas, de tomarse un momento para sí misma meditando o haciendo yoga, o de la buena compañía de queridos amigos con una copa de cava y comida sana y deliciosa.

Ha costado mucho conseguir que Jan escriba algo sobre sí mismo. Su modestia se interpuso junto a su aversión por la electrónica.
Jan es un hombre de familia; "los niños son el futuro" es una de sus citas favoritas. Para sus cuatro hijos y su amor eterno, Delphine, no hay montaña demasiado alta ni río demasiado profundo.Levantarse cada maldita mañana feliz y agradecido le convierte en un feliz apasionado de la gente, dispuesto a hacer de cada día una aventura.
Su pasión por la vida y su inagotable imaginación sólo le reportaron ventajas durante sus años como gurú de las ventas y director general de diferentes empresas. Pero su permanente deseo de disfrutar de la vida al máximo y de divertirse con su tribu y sus semejantes le llevó junto a su familia a la hermosa isla de Gran Canaria. Un nuevo lugar para seguir construyendo su red a su manera, tratando a los demás con respeto y sin expectativas. Un nuevo lugar para ver la belleza de la historia y combinar el patrimonio con un futuro sostenible.
Cuando Jan no está convenciendo a la gente de la nueva oportunidad que ha descubierto o buscando en la web el próximo reto en su teléfono -con el que tiene un amor odioso- disfruta viendo el hockey en plena acción o viendo a sus hijos surfear las olas del océano mientras se toma una dulce limonada.